Una tarde se juntaron un asno y un león para ir a cazar. El león utilizó su fuerza y el asno usaba las coces de sus patas. Cuando ya acumularon un cierto número de piezas, el león las dividió en tres partes y le dijo al asno:
– La primera parte me pertenece por ser el rey, la segunda parte también es mía por ser tu socio y la tercera, sobre la tercera mejor te marchas porque si no acabarás como los demás.
Moraleja de la fábula de Esopo: El león y el asno
Para que no te pase como al asno, asóciate con los de tu nivel, no con los más poderosos.