El perro y el cocinero

Un hombre preparo una cena para sus amigos y sus familiares; y un perro invito a otro perro amigo suyo.

–          Ven a mi casa a cenar conmigo -le dijo

El perro llegó lleno de alegría. Y se detuvo a contemplar el gran festín, y diciéndose a sí mismo:

–          ¡Qué suerte! Tendré comida hasta reventar y no pasaré hambre por varios días.

Y metido en sus pensamientos, movía el rabo con mucha alegría. Pero el cocinero al verlo moviéndose alegremente de aquí para allá, lo cogió de las patas y sin pensarlo, lo echo por la ventana. El perro se volvió lanzando fuertes alaridos, se encontró por el camino con otros perros, y le preguntaron:

–          ¿Cuánto has comido en la fiesta?

–         De beber tanto -contesto- ya ni me acuerdo por donde he salido.

Moraleja de la fábula

Moraleja de la fábula de Esopo: El perro y el cocinero

No te fíes de la generosidad que otros predican sino les pertenece.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *