Un hijo que había gastado todo su patrimonio, solamente le quedaba una manta. Entonces vio a una golondrina, pensando que la primavera se había adelantado, y que la manta ya no le haría falta, fue corriendo a venderla. Pero de pronto el mal tiempo llegó, entonces mientras paseaba con mucho frio, se encontró con la golondrina muerta por el frío.
– Te lo tienes merecido- le dijo- por adelantarte a tu estación, nos has dañado a los dos.
Moraleja de la fábula de Esopo: La golondrina y el hijo pródigo
Antes de tomar una decisión, ten en cuenta si es el momento adecuado para hacerlo.