Los lobos llamaron a los perros y le dijeron:
– Vosotros y nosotros somos parecidos, ¿Por qué en vez de pelearnos, no nos comportamos como hermanos? Lo único diferente que tenemos son nuestras costumbres. Nosotros somos libres, en cambio, vosotros sois sumisos y estáis sometidos a los hombres, aguantando los golpes, los collares y cuidando el rebaño. Cuando vuestros amos comen, a vosotros os dan solo los huesos. Os proponemos un trato, nos dais los rebaños y lo compartimos hasta hartarnos.
Los perros creyendo las palabras de los lobos, traicionaron a sus amos, y los lobos entraron al corral y lo primero que hicieron fue matar a los perros.
Moraleja de la fábula de Esopo: Los lobos reconciliándose con los perros
Nunca hay dar la espalda y traiciones quien te ayuda y confía en ti.