Había culebra que, de frío yerta,
en el suelo estaba medio muerta
un hombre la cogió, fue tan bueno,
que cuidadosamente la abrigó en su seno.
Apenas revivió, cuando la ingrata
a su gran salvador, traidora lo mata
Había culebra que, de frío yerta,
en el suelo estaba medio muerta
un hombre la cogió, fue tan bueno,
que cuidadosamente la abrigó en su seno.
Apenas revivió, cuando la ingrata
a su gran salvador, traidora lo mata